Semana de emociones fuertes para Bitcoin. El precio de BTC llegó a caer por debajo de los 105.000 $, tocando mínimos no vistos en 15 semanas (fuente). La caída se produjo tras varios intentos fallidos de superar la resistencia entre 112.000 y 116.000 $, lo que ha dejado al mercado atrapado en una banda de lateralidad bajista entre 104.000 y 107.000 $. El volumen de operaciones aumentó drásticamente, lo que confirma que el movimiento fue protagonista entre traders, con muchas liquidaciones forzadas (más de 1.200 millones de dólares en 24 horas, según fuente y fuente).
En poco tiempo, Bitcoin perdió hasta un 8% semanal, borrando gran parte de las subidas previas y acercándose a promedios móviles clave que suelen actuar como soportes (MA50 semanal y MA200 diaria). Las liquidaciones masivas han provocado «margin calls» en contratos apalancados: es decir, los exchanges han cerrado automáticamente posiciones alcistas de traders que no podían cubrir sus pérdidas, lo que a su vez amplifica la presión bajista.
Por si fuera poco, los analistas señalan una “descarga controlada de apalancamiento” y no tanto un pánico desatado. El «interés abierto» (el total de contratos apalancados aún vivos) cayó a niveles vistos a mitad de año tras esta limpieza de mercado. Los fondos ETF de Bitcoin en EE. UU. han visto flujos de salida, y los traders ahora miran de cerca si BTC es capaz de mantenerse por encima de los 104.000 $ o si perderá este suelo psicológico, abriendo la puerta a caídas hacia la zona de 100.000 $ (fuente).
El sentimiento del mercado se ha tornado bastante cauteloso, rozando el miedo tras el desplome. La mayoría de los especuladores y muchos «traders de apalancamiento» han sido barridos, y algunos conocidos del mundillo han sufrido liquidaciones públicas de varios millones de dólares (fuente). No obstante, algunos “whales” (grandes poseedores de BTC) han empezado a abrir posiciones alcistas, lo que ha provocado un debate entre analistas: ¿estamos ante un rebote inminente o simplemente es una trampa más en un mercado aún inestable?
El hecho de que hayan aparecido casi 1.000 millones en USDT nuevos (la mayor stablecoin) sobre Ethereum podría señalar la entrada de nueva liquidez esperando volatilidad, ya sea para aprovechar precios bajos o para cubrir riesgos en un entorno de incertidumbre (fuente).
Mientras tanto, el dominio de Bitcoin crece a costa de caídas más duras entre altcoins, típico de fases defensivas donde el dinero busca refugio en BTC mientras peligra el apetito por riesgo.
Las regulaciones internacionales siguen evolucionando a cámara lenta. Un informe (FSB, supervisado por el G20) subraya que las leyes de privacidad sobre cripto siguen poniendo palos en las ruedas a la cooperación entre países (fuente). Según el informe, la falta de marcos de reporte comunes, el acceso limitado a datos y las diferencias regulatorias favorecen el arbitraje regulatorio (que básicamente significa que empresas o usuarios se van allá donde las reglas son más blandas) y dificultan identificar riesgos sistémicos. La fragmentación global complica aún más la supervisión, y el impulso de crear un marco único sigue atascado.
Por otro lado, Ghana pone el turbo: su banco central quiere una ley para regular el sector cripto antes de diciembre, con licencias y nuevos controles para exchanges y servicios vinculados a cripto (fuente). El país africano ya registra más de 3 millones de usuarios cripto, lo que supone el 17% de la población. Sin embargo, el éxito dependerá de si el equipo regulador logra ponerse en marcha a tiempo.
En Asia y Europa, Binance intensifica su expansión tras la adquisición definitiva de Gopax en Corea del Sur, aunque bajo la lupa de reguladores, mientras que Francia endurece sus controles contra el blanqueo de capitales sobre los exchanges (fuente).
A pesar del temblor bursátil, la llegada de casi mil millones de USDT emitidos en Ethereum muestra que la infraestructura cripto sigue creciendo y adaptándose a picos de volatilidad (fuente). Estos movimientos sugieren actividad significativa de market makers y traders institucionales, que buscan aprovechar la liquidez generada por las caídas.
Por otra parte, el proceso regulatorio en Ghana podría derivar en una mayor apuesta por la adopción formal de servicios cripto, abriendo la puerta a innovación local y a nuevas oportunidades de negocio en la región.
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Aviso legal: Los criptoactivos son instrumentos de inversión de alto riesgo y pueden no ser adecuados para todos los inversores. Este contenido no constituye asesoramiento financiero. La inversión en criptomonedas puede implicar pérdidas parciales o totales. Antes de invertir, consulta la regulación aplicable y evalúa tu perfil de riesgo.
